La situación económica de los Austrias fue muy negativa por distintos motivos, y se refleja en un hecho trascendental para la vida de los ciudadanos: el resello de la moneda. Ya lo hemos comentado.
La historia de los resellos es compleja y aquí hablaremos de los resellos que tuvo una moneda, ésta de 8 maravedíes. Pero hubo más y en piezas de otros valores. También lo hemos comentado.
Pero lo que ocurre siempre es que los resellos se realizaron por manos no expertas, en plazos muy cortos de tiempo y en piezas ya muy desgastadas por el uso, por lo que es difícil encontrarlas en las que el resello se vea con claridad, situación que se acrecienta si la pieza tiene dos resellos, y no te digo si tiene tres.
Pues este es el caso. Ahora veremos una pieza con tres resellos y en muy buena conservación
Peso: 5´2 gramos
Anverso: PHILIPPVS III D G VIII
Reverso: HISPANIARVM REX
En negro la parte conservada
Pieza original:
8 maravedíes de Felipe III, de la ceca de Segovia. Estas monedas se acuñaron en el Real Ingenio por la perfección que tienen; el procedimiento era por molino de tipo hidráulico, movido por las aguas del Eresma. Las batidas en otras cecas son mucho más toscas por serlo a martillo. La fecha no aparece; tendría que estar justo bajo la rosa a la izquierda del anverso y podría ser desde 1599 a 1621, es decir desde su proclamación como rey hasta su muerte.
Resello de 12 (XII) maravedíes de 1641:
Está repintado en color verde.
Hay que tener en cuenta que estas monedas habían sido devaluadas anteriormente a 4 maravedíes, por lo que al resellarse a 12 maravedíes se multiplicaba su valor por tres. Pero tú no tenías tres veces más de dinero, al contrario, tenías tres veces menos. Porque si entregabas 3 monedas para su resellado (4 x 3 = 12 maravedíes) ahora te devolvían solo una porque ya valía 12 maravedíes. Y si, por ejemplo, después ibas a comprar un pan, que valía en principio tres monedas, ahora te volvían a pedir tres monedas que ya no eran 12 maravedíes sino 36.
Todo esto se debió a que en esos años se produjeron las revoluciones de Cataluña y Portugal y el Estado tenía acuciante necesidad de dinero para pagar las tropas.
Resello de 8 (8) maravedíes de 1651-2
Repintado en azul
La situación era agónica pues a continuación de la devaluación que pasaba de 12 a 8 maravedíes, en 1652 se ordenó que su valor pasase a la cuarta parte de su valor, es decir 2 maravedíes. Se llegó al límite de que no se sabía el valor del dinero que tenías, y el interés de desprenderse de la moneda de vellón. Y se optó por no contar el valor de las monedas sino que se pesaban.
Resello del anagrama, 4 maravedíes de 1658-9
Repintado en rojo (RX en una cara y PHVS en otra)
Problemas externos influyeron en la economía española, entre ellos la falta de entrada de plata debido al bloqueo francés que había tomado Santa Cruz de Tenerife.
Al final se optó por lo mismo que anteriormente, al resello, pasando los 8 maravedíes a un nuevo valor de 4, y para no faltar a la historia se bajó en 1659 su valor a 2 maravedíes.
Animo con tus artículos!! .Vas nutriendo nuestros conocimientos de historia y sus monedas..Me resultan muy curiosos tus artículos y su información. Gracias por esas valiosas aportaciones.Un abrazo.
Angel, me miras con buenos ojos
Saludos