El primer emir de Al Andalus: Abderramán I

El primer emir de Al Andalus: Abderramán I
 Con Abderramán I aparecen las acuñaciones en plata que desde el inicio de la invasión se habían reducido a cobres y a escasos dinares. Son acuñaciones de buena calidad tanto en lo relativo al metal como a aspectos estéticos.
Los dírhams que comienzan con Abderramán I mantienen la misma estructura que los orientales de sus antecesores Omeyas diferenciándose de éstos exclusivamente en la ceca que ahora pasa a ser Al Ándalus, y como es lógico la fecha. Es más, su parecido es tal que a veces podrían confundirse.  En esos momentos los dirhames orientales son ya abasidas y tienen unas leyendas distintas. Abderramán continúa como decimos con el mismo tipo, dando así continuidad y legitimidad a su gobierno.
Aparece no obstante una nueva serie (la segunda foto es ejemplo de ello) en la que los dirhames presentan una escritura más estilizada que dificulta su lectura.
La ausencia de adornos es generalizada exceptuando las gráfilas en ambas caras.
Su nombre completo era Abd Ar-Rahman ibn Mu’awiya ibn Hisham ibn Abd al-Malik, y como apodo al-Dahil, el Inmigrado.  Era el único descendiente vivo de la rebelión abasida en Siria. Llegó a la península y consiguió hacerse nombrar emir de Al Ándalus, inaugurando una dinastía, la Omeya de Al Andalus, que sería el referente occidental de la cultura musulmana y convirtiendo a Córdoba en una de las tres ciudades más importantes del mundo junto con Damasco y Constantinopla.
Los hechos de armas que he seleccionado son tres:
La batalla de al-Musara, en la que venció a Yusuf al-Fihri, el último Gobernador de Al Andalus, a partir de la cual se posesiona de Córdoba. Era el 10 de du-l-hiyya del 138 H (14 de mayo del 756 JC).
En segundo lugar la rebelión protagonizada por los yemeníes de Sevilla. Marcharon éstos hacia Córdoba siendo interceptados por las fuerzas comandadas por un pariente del emir que venían del castillo de Almodóvar, y derrotados muy cerca del mismo, posiblemente en Mubassar (Bembézar)

  
Abderramán I, dirhames de los años 151 y 167 H (768 y 784 JC)
La batalla de Roncesvalles se libró entre la acuñación de estos dos dirhames
Y en tercer lugar uno de los hechos más importantes ocurridos durante su reinado, y que aunque conocido por todos no lo asociamos a Abderramán, fue la batalla de Roncesvalles, de la que vamos a hacer un pequeño comentario:
En la década del 770 el emir Abderramán ha afianzado el poder en el centro y sur de la península. Sus hijos desempeñan cargos importantes: Suleimán es walí de Toledo, y Abdalah lo es de Mérida. Hixén, el tercero, acompaña a su padre y recibe una esmerada educación, estando destinado a suceder a su padre.
El norte y oriente de España se encontraban en cambio movidos en revolución contra los Omeyas. Se sabe que el año 777 era walí de Zaragoza Suleimán ben Alarabi, que intenta proclamarse emir independiente de la España oriental, si no con aspiraciones más ambiciosas según algunos autores,  para lo que necesitaba apoyos importantes. Aquí es donde entra Carlomagno, al que solicita ayuda. En la primavera del año 778 Carlomagno invade España en ayuda del gobernador musulmán con el doble objetivo como mínimo de asegurar sus fronteras y hacerse con algunas ciudades hispanas.
Invadió la península hasta Pamplona, la que conquistó, y prosiguió hasta Zaragoza. Pero ben Alarabi se dio cuenta de que el rey francés no venía como auxiliar y socio sino que venía a enseñorearse de un reino. Porque al fin y al cabo se trataba de un ejército cristiano. Carlomagno se encontró cerradas las puertas de Zaragoza y lo más importante, la posibilidad de que se sublevaran todos los gobernadores y alcaides de las poblaciones próximas. Ante esto y por problemas surgidos en Francia decide volver por el mismo camino que había entrado, por los desfiladeros del Pirineo Oriental y por las gargantas de los Bajos Pirineos pues el ejército se encontraba dividido en dos facciones. En el segundo cuerpo iba la corte, los caballeros principales y los tesoros recogidos en la expedición.
En las laderas de Altabiscar e Ibañeta se apostaron los vascones que infringieron una importante derrota al ejército de Carlomagno el 15 de agosto del 778.
Incluso aparecen dudas sobre los vencedores: ¿eran vascones? ¿musulmanes? ¿vascones y musulmanes unidos?
Parece que estamos hablando de la invasión francesa de 1808 y la posterior retirada de 1814. Los acontecimientos son en varios aspectos similares.

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